De pintura no sé nada, pero de la impresión que surge la mirada, me permito volatilizar el comentario, pues me provoca una sensación de explosión floral, frenética y nerviosa en las líneas rectas que electrizan la expanción de los colores, y las esencias de esos capullos quedan desnudos pero, en lugar de sentirse observados, observan, como ojos de insecto volátil, nuestros detalles más imperceptibles. Explota en nuestra cara y observa cómo ha quedado nuestra perplejidad, en síntesis. Besos.
5 comentarios:
De pintura no sé nada, pero de la impresión que surge la mirada, me permito volatilizar el comentario, pues me provoca una sensación de explosión floral, frenética y nerviosa en las líneas rectas que electrizan la expanción de los colores, y las esencias de esos capullos quedan desnudos pero, en lugar de sentirse observados, observan, como ojos de insecto volátil, nuestros detalles más imperceptibles. Explota en nuestra cara y observa cómo ha quedado nuestra perplejidad, en síntesis. Besos.
Como haces? porque a mi no me sale jajajja yo siempre que veo algo me sale me gusta o no me gusta, te envidio!!!!
Las buenas nuevas, evangélicas o no, hay que celebrarlas así, con muchos colores.
Siempre amigo vagabundo...
Excelente trabajo me gusta tu arte!!
Te visito desde
http://desdoblamientointelectual.blogspot.com/
Suerte!!
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