Caballos y Camellos
Me anduve el mundo
y caminé kilómetros
monté caballos y camellos
comí en la arena
y ni una vez dormí.
Mi naturaleza no me
permite amar
más que mi propia sangre
y deambular entre fantasmas
de idealismos y
simplicidades que argumentan
vanaglorias traumáticas.
Quiero soltarme la vida
y dejar que la buena niñez
que me dio mi padre y mi madre
sea gracia alguna vez en mí
pero finge cada cosa en mí finge
sufre todo en mi se sufre
por necesidad o costumbre.
Madrid.
No hay comentarios:
Publicar un comentario